Al nacer los individuos solo somos un trozo de carne, de acuerdo con Freud, lleno de instintos. Por lo cual solo buscamos la satisfacción de nuestras necesidades físicas. Pero después estos instintos se convierten en pulsiones atreves de la relación materna.
Antes de continuar entendamos al instinto como una parte del individuo que esta determinada biológicamente. Esta necesidad tiene un orden bien establecido, es decir, tiene una forma de satisfacción bien especifica y un objeto de satisfacción adecuado, además esta estructurada en forma cíclica. Un ejemplo seria el hambre, la forma única de satisfacerla es comiendo. Y para ejemplificar el hecho de que es cíclica solo basta recordar que aunque en un momento nos alimentemos y nuestra hambre quede satisfecha, es decir cúmplanos con nuestra necesidad, el hambre regresara mas tarde.
Por otro el do la pulsión es una energía psíquica que se desprende de lo orgánico y que no se satisface, no se tiene objeto específico y no se extingue. La pulsión por ende tiene más que ver con la psique, con las emociones, con el sujeto.
Una vez descrita una breve diferenciación entre instinto y pulsión podemos entonces retomar el hecho de que los instintos se convierten en pulsión atreves de la relación materna.
Esto sucede cuando el niño es alimentado por primera vez por la madre, en este proceso debemos tomar en cuenta dos aspectos. Por una parte el niño experimenta un doble placer, uno de tipo orgánico al ser alimentado por la madre (el niño come) y el otro de tipo psíquico.
Lo anterior se da porque el niño al ser alimentado por la madre aparte del alimento recibe el cariño y de la madre atreves de mimos y alagas, lo cual hace al niño sentirse pleno. Este es satisfecho orgánica y anímicamente.
Pero aquí la pulsión aun no se presenta como tal es al repetir la vivencia anterior cuando la pulsión sale a relucir. En el momento en que el niño es alimentado por segunda vez por la madre el niño busca sentir ese doble vinculo que se dio en la primera vez, pero este ya no presenta siendo en este instante en el que se presenta la pulsión. Por tanto decimos que la pulsión vendría ser la búsqueda de ese doble vínculo la cual no se volverá a presentar dado que el niño vera satisfecha su necesidad biológica de la misma manera mas no estará presente el bienestar psíquico de esa primera vez.
Desde aquí el individuo a partir de esta relación con la madre empezara a convertirse en un sujeto. Es decir empieza a desarrollar su psiquismo.
Dado que el individuo apartar de ahí ya no solo esta determinado por sus necesidades biológicas (instintos), sino también por sus pulsiones. Siempre que cumpla con una necesidad buscara encontrar ese doble placer que experimento en la primera vez lo cual, como ya se dijo anteriormente, jamás se volverá a repetir. Esto quiere que la pulsión es esa energía que te impulsa a hacer las que nunca se acaba.
Y dado que no podemos vivir todo el tiempo a merced de esas necesidades la pulsión encuentra tres destinos los cuales ayudan a mantener un estado psíquico de alguna manera adecuado los cuales son la la represión, la sublimación y la fantasmatizacion.
En este caso hablaríamos de destinos de pulsión los cuales serian la final de acuerdo representaciones de las pulsiones y, dado quien la pulsión nunca podrá ser satisfecha de manera total, la búsqueda de objetos de satisfacción total.
A diferencia del estimulo, el cual actúa de un solo golpe y tiene una única acción de satisfacción adecuada (tengo hambre como). La pulsión funciona de diferente manera, la pulsión viene de adentro, no es momentánea y su esfuerzo no cesa.
A esa búsqueda constante de satisfacción a la cual nos lleva la pulsión Freud la llamo compulsión a la repetision. Esto es siempre estamos en la búsqueda del placer. En este caso Freud se cuestiona sobre la posibilidad de la existencia de un placer mayor y nos dice que si es posible al cual le llamamos goce.
Entonces hablamos de una cantidad de placer permitido el cual nos sirve par satisfacer nuestras necesidades psíquicas. En el caso del goce hablaríamos de un placer mayor pero el cual mano traería también una parte de desagrado.
Esto se deriva de nuestra estructura psíquica conformada por el ello, el yo y el superyó. La pulsión surgiría ni esta caso del ello y seria percibida por el yo y así vez el superyó se percataría de dicha pulsión. El yo buscaría la forma inmediata de cumplir la necesidad pulsional que se desprende del ello pero tendrá que analizar de acuerdo a la carga de superyó la forma mas apropiada de cumplirla logrando así mitigar los efectos de la energía pulsional.
En este caso diremos que el yo sirve a tres amos el ello (pulsiones), el superyó (la voz de la conciencia) y la realidad moral.
El placer, entonces, tiene tope, solo ese permite cierta cantidad de placer, cuando el placer pasa el tope se convierte eran goce es entonces cuando el placer duele. El goce se encuentra en las pulsiones de muerte y por tanto se convierte en una compulsión de repetición.
Como ya se menciono el goce es provoca así como placer provoca también dolor. Por lo cual la estructura psíquica del individuo se protege usando mecanismos de defensa. En este caso hablaremos de la represión. La represión es inconsciente es decir es yodistonica. En este caso decimos que e puede reprimir la representación de la pulsión mas no el afecto de esta.
En base a todo lo anterior hablemos de la estructura de psíquica del individuo entonces, la cual se constituye, como ya se dijo antes dele ello, el yo y el superyó.
Se dice que los neo psicoanalistas le dieron al yo el papel principal dentro de esta estructura psíquica con lo cual cometieron une error dado que ellos lo ponen como la parte concient6e del yo.
Freud, por su parte, dice que l yo más que una parte consiente de la personalidad es el mediador entre las instancias psíquicas.
El ello es entonces un vasallo del ello. El yo nace pues de las fuerza pulsionales del ello. Es decir el yo nace del grupo de representaciones pulsionales que le dan una estructura al yo.
Por ende el trabajo del yo es entonces lograr una conquista progresiva del ello.
Como ya dijimos el yo es un conglomerado de representaciones. Por lo cual diríamos entonces que l yo es una construcción múltiple.
Por tanto el la estructura psíquica a los 5 años estará incompleta, y estará siempre cambiando en base alas exigencias que l otro tenga de el. Es decir, el yo siempre va a estar expuesto a cambios debido a la influencia que otros hacen hacia el. El yo es lo que las otras personas creen que soy.
Aparte de las pulsiones y los instintos nuestra personalidad se forma también de la resolución del complejo de Edipo.
Freud empieza ha hablar del complejo de dio desde 1896 pero es hasta 1924 que logra concretarlo.
El complejo de Edipo se presenta, de acuerdo con Freud, en la etapa fálica del desarrollo del niño. Pero mas que de una cuestión cronológica el complejo de dio trata de una cuestión de apasionamiento.
Con esto nos referimos que n base al complejo de Edipo determinaremos la forma en que nos mostramos o colocamos ante los demás, las exigencias que hacemos hacia nuestro padres, y la elección de un rol sexual.
Hablando de posicionamientos empecemos por el caso de la figura y la función materna. Entendiendo que figura y función no son la misma cosa.
La figura materna o paterna se refiere a la presencia física del padre la cual en ausencia de puede ser sustituida por alguien mas que forme parte del medio del niño.
La función materna es la de es la de alimentar, va a establecer los limites corporales entre el y los otros, y ayudara al sujeto a identificarse con su corporarilidad su sensaciones.
La función del padre es la de establecer prohibiciones. Separa la figura de la madre y del niño par evitar que el niño sea devorado por la madre, establece leyes (ley simbólica) y reglas.
La ley de orden simbólico protege a la familia de los incestos, la psicosis y la perversión. Esta ley se encuentra arriba de la ley real del padre. Por tanto el padre es el conducto mediante el cual se ejerce la ley simbólica siendo así como el hijo se mantiene por debajo de la figura de los padres.
Mediante la ley real el padre rompe con la fantasía de que el hijo necesita a la madre y de que la madre necesita al hijo.
La relación de la madre y del hijo es una relación ilusoria de completad, aquí el niño aun no experimenta el temor ala castración. Es entonces cuando aparece el padre, es decir, realidad paterna he implementación del superyó., es aquí donde aparece el temor de castración, lo cual lo lleva desprenderse de la madre y a empezar a adjudicarse los atributos del padre.
En el caso de las niñas en un primer tiempo se da cuenta de la castración de la madre y termina por apegarse al padre, cuando el padre establece reglas la niña sea despega de su padre y vuelve a unirse a su madre para crearse la feminidad para mas adelante buscar un hombre igual al que consiguió su madre.
En base a todo lo anterior podríamos concluir pues, que la estructura psíquica de cada individuo se forma en base la relación que este tiene con su medio y la forma en este satisface sus necesidades partir de lo el mismo medio, empezando por la primer relación objetal con la medre hasta la resolución del complejo de Edipo. Y de como a partir de estos y otros aspectos se va formando la forma en este interactuara con su medio.
F. Rosas
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